Felipe VI. Proclamación sin Crucifijo
En la ceremonia de Felipe VI no estará el crucifijo que sí presidió la ceremonia del 22 de noviembre de 1975 y que es propiedad del Congreso. Tampoco habrá ninguna autoridad religiosa presente ni Misa posterior a la proclamación como tras la ceremonia de Juan Carlos I, para respetar la aconfesionalidad del Estado.
Estas son las dos grandes diferencias entre la proclamación de Juan Carlos I y Felipe VI, en lo que a la religión Católica (mayoritaria en España) se refiere. La moda de la laicidad visceral llega a la Casa del Rey. Sacar a Dios de España no es un buen camino. Nuestros dirigentes deberían aprovechar con coraje estos momentos para dar testimonio de su fe. Creer en Jesús no indispone a nadie para gobernar para todos los españoles.
Zenón de Elea