250.000 fieles rezaron el domingo ante el féretro del nuevo beato Juan Pablo II en la basílica de san Pedro
Las interminables colas durante los funerales del Papa polaco, se reeditaron ayer tras la ceremonia de beatificación de Juan Pablo II. El primero en arrodillarse ante los restos de su predecesor fue Benedicto XVI. Más de 250.000 fieles accedieron a la Basílica Vaticana hasta la madrugada del lunes para rezar ante el féretro de Karol Wojtyla.
Fuentes de la Santa Sede destacaron que en las primeras cinco horas que había permanecido abierta la Basílica de San Pedro, habían pasado hasta 60.000 peregrinos, unos 12.000 de media a la hora.
El féretro fue sacado de su tumba el pasado viernes en una ceremonia privada y posteriormente fue colocado durante dos días frente a la tumba de San Pedro, que se encuentra en las Grutas Vaticanas.
El domingo el ataúd fue transportado desde las Grutas Vaticanas hasta el Altar de la Confesión, en la Basílica de San Pedro,para que fuera venerado por Benedicto XVI y los fieles que han participado en la beatificación.
Las celebraciones con motivo de la beatificación de Juan Pablo II concluirán este lunes con una misa en honor al nuevo beato que se celebrará en la Plaza de San Pedro de Roma a las 10,00 horas y será presidida por el Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone.
Durante este lunes los peregrinos podrán continuar venerando los restos de Juan Pablo II y no se cerrará la basílica de San Pedro "hasta que no haya pasado el último peregrino", según confirmó el padre Federico Lombardi. La basílica permanecerá cerrada durante las dos horas que dure la ceremonia en honor al nuevo beato.
