Fisichella sale al paso del sacerdote que pagó un aborto. Explica que el trabajo social no lo es todo en la vida de un clérigo
El arzobispo Rino Fisichella, presidente del Consejo Pontificio para la Nueva Evangelización, ha visitado Barcelona y ha salido al paso de la actuación del sacerdote Manuel Pousa, quien ha reconocido en un libro que pagó el aborto de una mujer. Fisichella ha declarado que “el trabajo social no lo es todo en la vida de un sacerdote”.
En una entrevista publicada por ‘La Vanguardia’, el arzobispo afirma que “ante la gravedad del aborto, no se puede razonar sólo con emotividad; hay que pensar con lucidez, distinguir el bien del mal”. También señala que “los sacerdotes debemos tener vida de comunidad sacerdotal y de comunicación con el obispo, no actuar de modo aislado. Se precisa una intensa vida de oración para que el compromiso social no prime sobre nuestra misión como Iglesia”.
Por otra parte, Fisichella no ve mucha diferencia entre la secularización en España y en otros países europeos, incluida Italia. Explica que aquí “hay gran vitalidad religiosa, de movimientos, parroquias, escuelas, hospitales…”. Sin embargo, “el laicismo avanza” y “la Iglesia debe reevangelizar España”.
El Consejo Pontificio para la Nueva Evangelización fue creado por el Papa en junio pasado para promover la evangelización en aquellos países de antigua tradición cristiana que están viviendo una progresiva secularización. Antes de ocupar su cargo actual, Rino Fisichella fue presidente de la Pontificia Academia de la Vida, rector de la Pontificia Universidad Lateranense y capellán del Parlamento italiano.
