La lluvia no asustó a los amigos del Papa
Impresionó en el mundo eclesiástico la firmeza con la que los fieles presentes en la Plaza de San Pedro durante la Misa del Domingo de Resurrección aguantaron la tromba de agua que no dejó de caer durante toda la Eucaristía. Nadie se movió de su sitio, y algunos lo interpretaron como un verdadero gesto de cariño hacia el Papa en unos momentos en los que está recibiendo tantas críticas.
Zenón de Elea