Un hacker ilustró a los obispos europeos sobre los peligros a los que se enfrentan las webs católicas acechadas por los piratas cibernéticos
El pasado fin de semana, cientos de delegados de medios de las conferencias episcopales de toda Europa han participado en un congreso en El Vaticano sobre la cultura de Internet y la comunicación de la Iglesia. Los invitados incluyeron representantes de Facebook, YouTube, Wikimedia o Google. Según informa Zenit también hubo un invitado, nada conocido, pero digno de ser escuchado: un hacker que advirtió a los obispos sobre los peligros que constituyen los ataques cibernéticos.
Del hacker, de nacionalidad suiza, y de 17 años de edad, los organizadores accedieron a no desvelar su identidad. Fue presentado a los miembros de la Comisión Episcopal Europea para los Medios de Comunicación, en la Antigua Aula del Sínodo en el Vaticano, con el apelativo de "Petit frère Bruno" (hermanito Bruno).
El joven hacker, informa Zenit, que ha tenido algunos problemas con la ley, aceptó la invitación de los prelados para ayudarles a penetrar en la mentalidad de esos jóvenes para quienes la informática se convierte en un medio para reivindicar una libertad de información que en ocasiones acaba en delito. "Para muchos hackers podría ser una gran victoria simplemente desfigurar el sitio vaticano poniendo una fotografía de Osama Bin Laden", explicó Petit frère Bruno al portal de noticias con sede en Roma.
El hacker alertó a los representantes de las conferencias episcopales de actuar en la red con "sentido común" y "muchísima prudencia".
En la actualidad Bruno trabaja, con su propia compañía de informática, para empresas que quieren verificar sus sistemas de seguridad. "Ya no me interesa penetrar en sitios de gobiernos, ejércitos o partidos políticos", reconoce, considerando que en el futuro puede ganar bastante dinero con el mercado electrónico.
