El féretro de Manuel Fraga, la bandera y la Policía

El coche fúnebre que transportaba los restos mortales del expresidente de la Xunta llegó el pasado martes a la iglesia parroquial de Perbes, en el concello coruñés de Miño, con casi veinte minutos de adelanto. Una puntualidad que no extrañó a los que trabajaron y conocían a Manuel Fraga, pero que trastocó la coordinación del cortejo fúnebre. De hecho, el coche funerario llegó antes que el cardenal Antonio María Rouco Varela, quien tuvo que darse prisa para organizar la misa, y que el vehículo de protocolo de la Xunta que traía la bandera de España que cubriría, junto a la gallega, el féretro del político lucense. La concejala de Economía y Hacienda de Miño, Eva Vilariño logró "rescatar" a bandera española a tiempo: "los responsables de protocolo de la Xunta me dijeron que había un problema porque el coche en el que traían la bandera de España no podía pasar el cerco policial. Me pidieron si yo podía ir a recogerla al Ayuntamiento, que la habían dejado allí. Salí corriendo. Me dio tiempo porque la misa todavía no había empezado", explicaba ayer.

Así, aunque el féretro de Manuel Fraga entró en la iglesia cubierto tan solo por la bandera de Galicia, al salir estaba engalanado con las dos enseñas.