El nuevo trabajo del mayordomo del Papa
Hasta ahora Paolo Gabriele ha cumplido tan sólo un mes de su condena de un año y medio. La gracia papal, el perdón que desde un principio se daban por seguras no han llegado aún, pero comienza a perfilarse para Navidad, junto con un nuevo trabajo lejos de los muros vaticanos.
El perdón que Benedicto XVI ya ha dado a Paolo Gabriele podría hacerse legalmente efectivo en diciembre, entorno a las fechas de día de Navidad, cuando Gabriele habría cumplido dos de los 18 meses de pena que se le impusieron. Pero antes de que dejen en libertad al causante del mayor escándalo de filtración de documentos en el Vaticano, se le debe buscar una ocupación discreta y sobre todo lejos del apartamento papal y de la curia.
Según Vatican Insider, una institución o ente relacionado con el Vaticano –pero siempre extraterritorial- sería quien acogería al ex mayordomo. La mayor sanción que prevé el reglamento interno es el despido y la prohibición de ocupar un nuevo trabajo en la Santa Sede –que ya se le ha impuesto- pero el sentido de justicia con la familia de Gabriele lleva al Vaticano a seguir –todavía hoy- pagando su salario al exmayordomo y ahora a buscarle otra ocupación.
Los dos principales promotores del ex mayordomo también han sido elegantemente apartados de los muros vaticanos. James Michael Harvey fue creado cardenal el pasado fin de semana y enviado como arcipreste a la basílica de San Pablo Extramuros. El obispo regente, Paolo De Nicolò, que también recomendó a Gabriele ha sido 'jubilado'. Por lo que el apartamento papal se limpia del mal recuerdo del caso Vatileaks.
Terminar de perfilar el trabajo alejado de la Curia, pero en el que se le pueda tener controlado es el único requisito que falta para que la gracia papal indulte a Gabriele, cerrando definitivamente el eterno caso y con ello, el de Paolo Gabriele y la traición del mayordomo.
